Las personas que se incorporan en el servicio público contraen un compromiso de especial importancia con la sociedad. Cada una de sus acciones puede influir directamente en la confianza que la ciudadanía les otorga, e incluso en las instituciones mismas. Por esta razón, el desempeño y comportamiento de las personas servidoras públicas debe ser íntegro, con orientación al combate a la corrupción y a la impunidad y, en todo momento, atender las necesidades de la población, a fin de incidir de forma positiva en el desarrollo nacional.
Para contribuir en el logro de este objetivo, el 8 de febrero de 2022, la Secretaría de la Función Pública emitió el nuevo Código de Ética de la Administración Pública Federal, instrumento cuyo objetivo es orientar el comportamiento de las personas servidoras públicas por medio de principios, valores, reglas de integridad y compromisos idóneos para que toda labor se realice por y en beneficio de la sociedad, con miras a la excelencia. De este documento destaca su enfoque en el respeto a los derechos humanos, la igualdad de género y la prevención de las conductas que laceran la dignidad de las personas, como el hostigamiento y acoso sexuales, y el acoso laboral y la discriminación.
Con base en lo anterior, la Secretaría de la Función Pública elaboró la presente versión amigable del Código de Ética, con los objetivos de facilitar el conocimiento y apropiación de ese instrumento, e invitar a sus lectores a que se sumen en la importante labor de combatir la corrupción y la impunidad.
Código de Ética amigable:
